Con esta entrada trataremos de abrir una ventanilla a la vida de la escuela para mostraros con imágenes como es una jornada lectiva a Nau para los niños y niñas de la etapa de educación infantil.

ENTRADA RELAJADA 9-9.30 h

La llegada a la escuela es un momento importante y lo cuidamos como tal.

El hecho de que la entrada sea relajada permite a los maestros tener un margen de tiempo dedicado a acoger a los niños y a sus familias y un espacio donde poder compartir información. Si un niño no ha dormido bien aquel día, si está triste porque ha perdido su juguete preferido, o si está muy contento porque aquel día irá a comer a casa de un amigo… es importante conocer todo esto para acompañar al niño de la forma más adecuada.

 

Por otra parte permite que cada familia disponga del tiempo que necesite para despedirse e iniciar la jornada a la escuela con calma.

ASSSAMBLEA DE INICIO 9.30-10 h

Las asambleas de inicio son uno de los momentos más importantes del día por varios motivos. Por un lado es un espacio de encuentro del grupo y con su adulto de referencia. Un momento para fortalecer vínculos y para cultivar el sentimiento de pertenencia.

También es el momento en que los adultos presentan las actividades preparadas para el día y los niños deciden si quieren participar en alguno de los talleres o por el contrario prefieren dedicar su tiempo a la actividad autónoma a los ambientes preparados.

TALLERES / ACTIVIDAD AUTÓNOMA. 10 – 11 h

Después de la asamblea empieza el momento de talleres y los niños que así lo hayan decidido inician la exploración autónoma en los ambientes preparados.

La tarea de observación de los acompañantes es importante a la hora de programar los talleres, puesto que estos son una oportunidad para cubrir las necesidades de los niños y de acompañar sus intereses.

 

La temática de los talleres es muy variada: talleres donde el protagonista es el mundo sensorial, otros donde se trabaja la inteligencia lingüística, la matemática, la naturalista… talleres de arte, de música, de cocina… todo desde una mirada transversal e interdisciplinaria.

MERIENDA / ACTIVIDAD AUTÒNOMA. 11 – 12 h

 

A las 11, una vez acaban los talleres, la mayoría de los niños ya tienen hambre y se disponen a merendar. Si el tiempo acompaña, disfrutamos de merendar al sol, algunos niños lo hacen en pareja o en pequeño grupo, otros se van reuniendo en grupos más grandes que se forman de manera espontánea y también hay quién prefiere estar este rato a solas.

Es un momento que nos regala preciosas imágenes de complicidad y meriendas compartidas.

Una vez van acabando de merendar se reactiva el juego. Los niños pueden desarrollar un juego más motriz en los espacios exteriores o dirigirse a los espacios interiores que despacio se vuelven a abrir.

ACTIVIDAD AUTÒNOMA. 12 – 13 h

 

A las 12 todos los ambientes de infantil se encuentran abiertos y preparados para recibir a los niños. Son ellos quienes, desde la conexión con sus necesidades, deciden a qué actividad dedicar su tiempo.

En el espacio de juego simbólico, en el de construcciones, en el de lenguajes, en el laboratorio de arte o en nuestro estimado bosquecillo… Los acompañantes están bien presentes para acompañar a los niños en sus intereses, ofrecerles propuestas o presentar materiales para hacer de este un momento rico en experiencias.

13.00 – 13.30 ASSAMBLEA DE CIERRE 
Ya se acerca el final de la jornada y niños y adultos nos encontramos para celebrar una asamblea de cierre. Cada una de ellas es única y cumple muchas funciones: reencontrarnos después del día para explicarnos como nos ha ido, contar un cuento, cantar una canción, compartir anécdotas y quizás hablar de algún malestar o conflicto que haya surgido durante la mañana.

13.30 – 14.00 SALIDA RELAJADA

Después de esta asamblea, hacia las 13.30, las familias ya empiezan a llegar y hasta las 14.00 disponen de 30 minutos para compartir el espacio con los niños y niñas y niñas, hablar con los acompañantes sobre cómo han pasado el día su pequeño, compartir conversaciones con otros padres, madres o abuelos… y poco a poco marchar a casa a descansar.